Aunque Iceberg resuelve este problema, también se necesitan estándares abiertos en otras áreas. Ahora estamos viendo surgir un nuevo campo de batalla en el área de los catálogos de datos, que desempeñan un papel fundamental en una arquitectura de múltiples motores. Los catálogos hacen que las operaciones en las tablas sean confiables al admitir transacciones atómicas. Esto significa que los ingenieros de datos y los canales que construyen pueden modificar las tablas simultáneamente y las consultas en estas tablas producen resultados precisos. Para lograr esto, todas las operaciones de lectura y escritura de tablas de Iceberg, incluso desde diferentes motores, se enrutan a través de un catálogo. Los proveedores de SaaS y los hiperescaladores pueden usar el catálogo como una forma de crear fidelidad del cliente, pero las empresas se están dando cuenta de esto. Entienden que, así como Iceberg proporciona un formato común para las tablas, un estándar de catálogo abierto les permitirá elegir la mejor herramienta para el trabajo y maximizar el valor de sus datos. Los estándares abiertos son buenos para los negocios, buenos para los clientes y buenos para el ecosistema en general. Las empresas tienen arquitecturas de datos complejas y los estándares abiertos les permiten usar datos en todas estas plataformas sin incurrir en costos adicionales y desafíos de gobernanza. Los estándares abiertos también promueven la innovación, porque obligan a las empresas a competir en una implementación y permiten a los clientes elegir entre ellos.