Los datos sísmicos de Marte indican que nuestro planeta vecino es alcanzado unas trescientas veces al año por meteoritos del tamaño de pelotas de baloncesto. Un estudio escrito por investigadores del Imperial College London y ETH Zurich pudo utilizar datos recopilados por el InSight Lander de la NASA, que está equipado con una herramienta sismológica denominada Experimento Sísmico para Estructura Interior (SEIS). Es el único sismómetro en Marte y una fuente crucial de información sobre los mayores eventos que ocurren sobre y debajo de la superficie de Marte, incluidos los impactos de meteoritos. Si bien los cráteres son evidencia obvia de que un meteorito golpeó la superficie del planeta rojo, el estudio dice que la actividad sísmica podría ser una forma más precisa de calcular con qué frecuencia Marte es golpeado por meteoritos. Los impactos de meteoritos provocan martemotos de alta frecuencia, distintos de otros eventos sísmicos. Los investigadores pudieron registrar tres impactos de meteoritos antes de que se detectaran sus cráteres, lo que da credibilidad a la teoría de que los sismómetros proporcionan mejor evidencia de los lugares de caída de meteoritos que las confirmaciones visuales de los cráteres, que pueden ser tan pequeños como de unos pocos metros de diámetro. Los nuevos datos basados ​​en martemotos sugieren que Marte es golpeado por meteoritos entre 280 y 360 veces al año. Los impactos de meteoritos son una métrica importante para determinar la edad planetaria, ya que las superficies más antiguas tienen más cráteres que las más jóvenes. Este método ya se ha aplicado a la Luna, aunque los cálculos difieren para Marte, ya que tiene una atmósfera delgada que puede desintegrar pequeños meteoritos, además de su posición muy diferente en el sistema solar. «Se podría considerarlo como una especie de ‘reloj cósmico’ que nos ayuda a datar las superficies marcianas», dijo Natalia Wojcicka, coautora e investigadora asociada del Imperial College de Londres. «Y tal vez, más adelante, otros planetas del sistema solar». Por cierto, también se teoriza que los meteoritos son una fuente útil para crear oxígeno en el propio Marte en lugar de importarlo o los materiales necesarios para producir oxígeno de la Tierra, por lo que poder encontrar más de ellos sería útil si los humanos alguna vez colonizaran el planeta. Los datos sísmicos también son útiles para otros fines. Wojcicka dice que instalar más sismómetros, incluso si son más simples que el SEIS, contribuiría en gran medida a recopilar más datos sobre los impactos de meteoritos y otras actividades sísmicas. «En la Tierra, se puede comprender más fácilmente la estructura interna de nuestro planeta observando los datos de los sismómetros colocados en todo el mundo», dijo. «Para comprender mejor la estructura interna de Marte, necesitamos más sismómetros distribuidos por todo el planeta». La investigación más reciente sobre las entrañas de Marte basada en datos sísmicos sugiere que tiene un núcleo de hierro más pequeño y denso, rodeado por más roca fundida, de lo que se pensaba anteriormente. En general, la composición interna de Marte no es muy diferente de la de la Tierra, que también tiene un núcleo férrico encerrado en minerales y rocas fundidos. SEIS detectó recientemente el evento sísmico más grande jamás registrado en Marte, lo que según un estudio es una indicación de que partes de la corteza del planeta están sometidas a una gran tensión y pueden crear martemotos. ®