¡Bienvenido de nuevo a nuestra serie de blogs de confianza cero! En nuestra publicación anterior, analizamos la importancia de la seguridad de los dispositivos y exploramos las mejores prácticas para proteger los puntos finales y los dispositivos de IoT. Hoy, estamos cambiando nuestro enfoque hacia otro componente crítico de la confianza cero: la seguridad de las aplicaciones. En un mundo donde las aplicaciones están cada vez más distribuidas, diversas y dinámicas, protegerlas nunca ha sido más desafiante o más crítico. Desde aplicaciones y microservicios nativos de la nube hasta sistemas locales heredados, cada aplicación representa un objetivo potencial para los atacantes. En esta publicación, exploraremos el papel de la seguridad de las aplicaciones en un modelo de confianza cero, discutiremos los desafíos únicos de proteger las arquitecturas de aplicaciones modernas y compartiremos las mejores prácticas para implementar un enfoque de confianza cero para la seguridad de las aplicaciones. El enfoque Zero Trust para la seguridad de aplicaciones En un modelo de seguridad tradicional basado en perímetro, las aplicaciones suelen ser confiables de forma predeterminada una vez que están dentro de la red. Sin embargo, en un modelo de confianza cero, cada aplicación se trata como una amenaza potencial, independientemente de su ubicación u origen. Para mitigar estos riesgos, la confianza cero requiere que las organizaciones adopten un enfoque integral y de múltiples capas para la seguridad de las aplicaciones. Esto implica: Inventario y clasificación de aplicaciones: Mantener un inventario completo y actualizado de todas las aplicaciones y clasificarlas según su nivel de riesgo y criticidad. Desarrollo seguro de aplicaciones: integración de la seguridad en el ciclo de vida del desarrollo de aplicaciones, desde el diseño y la codificación hasta las pruebas y la implementación. Monitoreo y evaluación continuos: Monitoreo continuo del comportamiento de las aplicaciones y la postura de seguridad para detectar y responder a amenazas potenciales en tiempo real. Acceso con privilegios mínimos: aplicar controles de acceso granulares basados ​​en el principio de privilegios mínimos, permitiendo a los usuarios y servicios acceder solo a los recursos de la aplicación que necesitan para realizar sus funciones. Al aplicar estos principios, las organizaciones pueden crear un ecosistema de aplicaciones más seguro y resistente que minimice el riesgo de acceso no autorizado y violaciones de datos. Los desafíos de proteger las arquitecturas de aplicaciones modernas Si bien los principios de confianza cero se aplican a todo tipo de aplicaciones, proteger las arquitecturas de aplicaciones modernas presenta desafíos únicos. Estos incluyen: Complejidad: las aplicaciones modernas a menudo se componen de múltiples microservicios, API y funciones sin servidor, lo que dificulta mantener la visibilidad y el control sobre el ecosistema de aplicaciones. Naturaleza dinámica: las aplicaciones son cada vez más dinámicas, con actualizaciones frecuentes, escalamiento automático e instancias efímeras, lo que dificulta mantener políticas y controles de seguridad consistentes. Riesgos nativos de la nube: las aplicaciones nativas de la nube introducen nuevos riesgos, como API inseguras, configuraciones erróneas y vulnerabilidades de la cadena de suministro, que requieren experiencia y controles de seguridad especializados. Aplicaciones heredadas: muchas organizaciones todavía dependen de aplicaciones heredadas que no fueron diseñadas teniendo en cuenta los principios de seguridad modernos, lo que dificulta su adaptación con controles de confianza cero. Para superar estos desafíos, las organizaciones deben adoptar un enfoque basado en el riesgo para la seguridad de las aplicaciones, priorizando las aplicaciones de alto riesgo e implementando controles de compensación cuando sea necesario. Mejores prácticas para la seguridad de aplicaciones de confianza cero La implementación de un enfoque de confianza cero para la seguridad de las aplicaciones requiere una estrategia integral de múltiples capas. Estas son algunas de las mejores prácticas a considerar: Inventario y clasificación de aplicaciones: mantenga un inventario completo y actualizado de todas las aplicaciones, incluidas las aplicaciones nativas de la nube y locales. Clasifique las aplicaciones según su nivel de riesgo y criticidad, y priorice los esfuerzos de seguridad en consecuencia. Implemente prácticas de desarrollo seguras: integre la seguridad en el ciclo de vida de desarrollo de aplicaciones, utilizando prácticas como modelado de amenazas, codificación segura y pruebas de seguridad automatizadas. Capacite a los desarrolladores sobre prácticas de codificación segura y proporcióneles las herramientas y recursos que necesitan para crear aplicaciones seguras. Aplique el acceso con privilegios mínimos: implemente controles de acceso granulares basados ​​en el principio de privilegios mínimos, permitiendo a los usuarios y servicios acceder solo a los recursos de la aplicación que necesitan para realizar sus funciones. Utilice herramientas como OAuth 2.0 y OpenID Connect para gestionar la autenticación y autorización de API y microservicios. Supervise y evalúe aplicaciones: supervise continuamente el comportamiento de las aplicaciones y la postura de seguridad mediante herramientas como la supervisión del rendimiento de las aplicaciones (APM), la autoprotección de aplicaciones en tiempo de ejecución (RASP) y los firewalls de aplicaciones web (WAF). Evalúe periódicamente las aplicaciones en busca de vulnerabilidades y cumplimiento de las políticas de seguridad. Infraestructura de aplicaciones segura: asegúrese de que la infraestructura subyacente que respalda las aplicaciones, como servidores, contenedores y plataformas sin servidor, esté configurada de forma segura y protegida contra ataques. Utilice infraestructura como código (IaC) y prácticas de infraestructura inmutables para garantizar implementaciones consistentes y seguras. Implemente acceso a la red de confianza cero: utilice soluciones de acceso a la red de confianza cero (ZTNA) para proporcionar acceso seguro y granular a las aplicaciones, independientemente de su ubicación o del dispositivo del usuario. Las soluciones ZTNA utilizan políticas de acceso basadas en identidad y autenticación y autorización continuas para garantizar que solo los usuarios y dispositivos autorizados puedan acceder a los recursos de la aplicación. Al implementar estas mejores prácticas y perfeccionar continuamente la postura de seguridad de sus aplicaciones, podrá proteger mejor los activos y datos de su organización de los riesgos que plantean las arquitecturas de aplicaciones modernas. Conclusión En un mundo de confianza cero, cada aplicación es una amenaza potencial. Al tratar las aplicaciones como no confiables y aplicar prácticas de desarrollo seguras, acceso con privilegios mínimos y monitoreo continuo, las organizaciones pueden minimizar el riesgo de acceso no autorizado y violaciones de datos. Sin embargo, lograr una seguridad eficaz de las aplicaciones en un modelo de confianza cero requiere el compromiso de comprender su ecosistema de aplicaciones, implementar controles basados ​​en riesgos y mantenerse actualizado con las mejores prácticas de seguridad más recientes. También requiere un cambio cultural, en el que cada desarrollador y propietario de aplicaciones asuman la responsabilidad de proteger sus aplicaciones. A medida que continúa su viaje de confianza cero, haga de la seguridad de las aplicaciones una máxima prioridad. Invierta en las herramientas, los procesos y la capacitación necesarios para proteger sus aplicaciones, y evalúe y perfeccione periódicamente su postura de seguridad de las aplicaciones para mantenerse al día con las amenazas y las necesidades comerciales en evolución. En la próxima publicación, exploraremos el papel del monitoreo y el análisis en un modelo de confianza cero y compartiremos las mejores prácticas para usar datos para detectar y responder a amenazas en tiempo real. Hasta entonces, ¡manténgase alerta y mantenga sus aplicaciones seguras! Recursos adicionales: