Luego de una larga y difícil relación entre el gobierno de EE. UU. y TikTok, propiedad de la empresa china ByteDance, la Casa Blanca anunció que el presidente Biden firmó una ley que esencialmente prohíbe TikTok en los Estados Unidos, si ByteDance no se deshace de la aplicación dentro de este año. La nueva ley, inicialmente aprobada por el Senado, ahora le da a ByteDance nueve meses iniciales para llegar a un acuerdo que requeriría venderlo a una entidad diferente. Sin embargo, existe una disposición que permitiría al presidente conceder a ByteDance otros tres meses en función de determinadas circunstancias. La ley surge de preocupaciones sobre la seguridad nacional, ya que TikTok posee una gran cantidad de datos de usuarios en América del Norte. Como era de esperar, tanto TikTok como ByteDance no son fanáticos de este nuevo desarrollo. El portavoz de TikTok, Alex Haurek, afirmó que la empresa tiene la intención de impugnar la ley en los tribunales, lo que podría resultar en una extensión del plazo. Comenta: “A medida que sigamos desafiando esta prohibición inconstitucional, continuaremos invirtiendo e innovando para garantizar que TikTok siga siendo un espacio donde los estadounidenses de todos los ámbitos de la vida puedan venir de manera segura a compartir sus experiencias, encontrar alegría e inspirarse”.