Investigadores de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Aplicadas de la Universidad de Virginia han desarrollado un método práctico para la fabricación a gran escala de un material milagroso, MOF-525, que podría afectar significativamente la captura y conversión de dióxido de carbono. Dirigido por el profesor asistente Gaurav “Gino” Giri, el avance del equipo podría ayudar a mitigar el cambio climático y abordar las necesidades energéticas globales. Según el artículo publicado en Phys.org por Jennifer McManamay, el MOF-525 pertenece a una clase de materiales conocidos como metal. -estructuras orgánicas (MOF), caracterizadas por sus estructuras cristalinas ultraporosas con amplias superficies internas. Estas estructuras pueden atrapar varios compuestos químicos, lo que las hace ideales para aplicaciones en captura y conversión de carbono. Los investigadores emplearon una técnica llamada corte de solución para sintetizar MOF-525. En este proceso, los componentes de MOF se mezclan en una solución y se extienden sobre un sustrato con una cuchilla de corte. A medida que la solución se evapora, el MOF se forma como una película delgada sobre el sustrato. Este método permite la creación de membranas de gran área capaces de capturar dióxido de carbono y convertirlo electrocatalíticamente en sustancias químicas valiosas como el monóxido de carbono. El monóxido de carbono es útil en la fabricación de combustibles, productos farmacéuticos y otros productos. Al aumentar el ancho de la cuchilla de corte, se puede ampliar el área de superficie de la membrana MOF, mejorando su capacidad de reacción y rendimiento del producto. Esta escalabilidad hace que la técnica de corte de solución sea altamente efectiva para aplicaciones industriales. Dirigido a la conversión de CO2, el equipo demostró la viabilidad de usar MOF-525 para la captura de carbono y la conversión electrocatalítica. A diferencia de los métodos tradicionales de captura de carbono, que a menudo resultan en un almacenamiento indefinido de CO2, este El enfoque ofrece una forma de convertir el CO2 capturado en productos químicos de valor comercial con un aporte mínimo de energía. Los hallazgos de los investigadores fueron publicados en la revista Applied Materials and Interfaces de la American Chemical Society, con contribuciones de Connor A. Koellner, Hailey Hall, Meagan R. Phister, Kevin H. Stone, Asa W. Nichols, Ankit Dhakal y Earl Ashcraft. Archivado en verde. Lea más sobre Eco (medio ambiente) y Ciencia.