La startup fintech británica Revolut dijo el jueves que había recibido una licencia bancaria preliminar con restricciones de la Autoridad de Regulación Prudencial del Reino Unido, poniendo fin a una espera de tres años. La firma con sede en Londres ahora tiene tiempo para desarrollar su infraestructura y operaciones bancarias en el Reino Unido antes del lanzamiento oficial. Revolut solicitó por primera vez su licencia bancaria en 2021, pero se ha enfrentado a largas demoras. «El anuncio de hoy es un importante paso adelante para Revolut y para nuestros clientes. Es una tremenda responsabilidad ser un banco en el Reino Unido y trabajaremos incansablemente para ofrecer productos y servicios que mejoren la vida financiera de todos los que usan Revolut», dijo la directora ejecutiva de Revolut en el Reino Unido, Francesca Carlesi, en un comunicado. Una licencia bancaria en el Reino Unido permitirá a Revolut aceptar depósitos de clientes y también emitir productos como préstamos y tarjetas de crédito. Revolut se suma a una serie de otros bancos retadores como Monzo y Starling, que pretenden rivalizar con los actores bancarios tradicionales como Barclays. Uno de los problemas clave en torno al retraso en la recepción de una licencia bancaria fue que la estructura accionaria de Revolut era incompatible con las normas de la PRA. Los reguladores británicos exigieron a la empresa que fusionara sus seis clases de acciones en acciones ordinarias. Desde entonces, Revolut ha resuelto esto, llegando a un acuerdo para reestructurar su propiedad con el importante inversor tecnológico japonés SoftBank, según informó anteriormente CNBC. La licencia bancaria llega después de que las finanzas de Revolut volvieran a una base más sólida en 2023. Este mes, la empresa informó de un beneficio antes de impuestos de 2023 de 438 millones de libras (545 millones de dólares), pasando de una pérdida antes de impuestos de 25,4 millones de libras en 2022 a un resultado positivo. Los ingresos del grupo aumentaron un 95% hasta los 1.800 millones de libras, frente a los 920 millones de libras de 2022. Ryan Browne de CNBC contribuyó a este informe