Kaitlyn Cimino / Android AuthorityTL;DR Un estudio reciente recuerda a los usuarios de wearables que el seguimiento de la salud y el estado físico aún no es una ciencia exacta. Aunque muchas estadísticas como la frecuencia cardíaca y el VO2 máximo se pueden medir con un margen de error razonable, otras, como el seguimiento del sueño, son menos precisas. La revisión nos recuerda los límites de la tecnología wearable y la importancia de invertir en productos de calidad para reducir los márgenes de error. Los relojes inteligentes y los rastreadores de actividad adornan más muñecas que nunca, y la mayoría de los usuarios están tan interesados ​​en sus estadísticas de salud y estado físico como en sus herramientas inteligentes. Aquí en Android Authority, siempre damos el mismo peso a las capacidades y la precisión de un dispositivo al revisar un nuevo reloj o pulsera. Sin embargo, es importante recordar que los wearables están destinados a guiar a los usuarios, no a proporcionar una precisión milimétrica o retroalimentación de nivel médico. Un análisis general publicado recientemente subraya las limitaciones de las estadísticas de seguimiento de la salud y el estado físico y recuerda a los usuarios que deben considerar sus estadísticas con cautela. Empezando por los aspectos positivos, el análisis concluyó que la mayoría de los dispositivos portátiles pueden medir la frecuencia cardíaca con una precisión del 3 % y pueden registrar de forma igualmente fiable la variabilidad de la frecuencia cardíaca, así como los posibles signos de arritmia. Los dispositivos portátiles también pueden proporcionar estimaciones sólidas relacionadas con la aptitud cardiorrespiratoria, normalmente denominada VO2 máximo en el dispositivo. Estas métricas son fundamentales para una amplia gama de controles de salud y estado físico, y la precisión del sensor de frecuencia cardíaca suele ser un foco de atención en los nuevos lanzamientos. Por otro lado, el análisis encontró mucha menos precisión en lo que respecta a los datos de calorías. Hemos analizado los obstáculos de esta métrica en el pasado, pero si bien no es una sorpresa ver estos hallazgos, vale la pena señalar una inexactitud de aproximadamente el 15 al 21 %. La quema de calorías es una métrica que utilizan con mayor frecuencia quienes controlan de cerca su peso, y los datos incorrectos utilizados sin escepticismo pueden tener consecuencias negativas. Asimismo, el estudio también encontró que el tiempo de sueño y la eficiencia del sueño son inexactos en más del 10% y la latencia del sueño es tan inexacta como el 180% al comparar los wearables con la polisomnografía. Las plataformas de seguimiento del sueño se han estado expandiendo en el campo de los wearables, pero la mayoría de los revisores expresan constantemente advertencias sobre cuán fielmente se debe confiar en estas estadísticas. Una vez más, la mejor práctica es usar su wearable como una guía general cuando se intenta crear mejores hábitos de sueño, no como datos exactos y concretos. En resumen, los wearables son herramientas imperfectas. Si bien las empresas continúan refinando y mejorando sus capacidades, muchas brindan detalles de salud y estado físico que no están validados médicamente. Sin embargo, cuando se usan con precaución, los relojes inteligentes y los rastreadores de actividad física son fantásticos compañeros de salud. Lo más importante que pueden hacer los compradores es elegir dispositivos de calidad en el momento de pagar para reducir el inevitable margen de error. ¿Tiene un consejo? ¡Hable con nosotros! Envíe un correo electrónico a nuestro personal a news@androidauthority.com. Puede permanecer anónimo o recibir crédito por la información, usted elige.Comentarios